Si hay algo que me cuesta horrores hacer es depilarme las cejas. Lo paso fatal: no me veo bien y me pellizco cada dos por tres, se me saltan las lágrimas, siempre me paso o no llego... Tengo que reconocer que, como mi época loca coincidió con los finales de los 80 y principios de los 90, tuve la suerte de que se llevaban las cejas poderosas, con lo que no tuve que preocuparme. Tampoco tenía que hacerlo mucho porque soy medio rubia y no son muy espesas, así que las dejaba a su aire. Hasta que un día una amiga me convenció para depilármelas ¡en qué hora! Desde entonces, mantenerlas más o menos visibles se ha convertido en mi pequeña tortura particular.
Sobre todo porque, hay que reconocerlo, las cejas son importantísimas para tener una buena imagen, y una depilación adecuada puede hacer milagros con la cara. Perece mentira que tan sólo unos poquitos pelos de más -o de menos- cambien tan sutilmente, pero con tanto efecto, el rostro. Pero no es tan fácil darles la forma adecuada, la que se adapta mejor a cara forma de la cara y, sobre todo de los ojos. Y no digamos ya si se trata de que las dos queden igual...
Por eso, personalmente creo que una de las mejores "inversiones" que se pueden hacer en cuanto a belleza se refiere es una buena depilación de cejas profesional. Es la mejor forma de asegurarte de que les das la forma correcta. Y, a partir de ahí, no es difícil mantenerlas en casa, eliminando los pelillos que las deforman en cuanto hagan su aparición y, de vez en cuando, volver de nuevo a una "puesta a punto" experta.
Yo he probado varios sistemas distintos. Y, como siempre ando con prisas, los que más me gustan son los llamados "Bares de Cejas", como los que tiene Benefit en muchas de las perfumerías de Sephora, y en El Corte Inglés. Los stands de Benefit de por sí son una monada, y en lo que a cejas se refiere, saben cómo sacarle todo el partido a la mirada y te dejan perfecta en un momento.
Uno de mis últimos descubrimientos es Con Hilo Depilo, una cadena especializada en depilar con hilo no sólo las cejas, sino los labios, las piernas... todo. Es un método muy curioso, como ves en la foto: en lugar de pinzas utilizan unos largos hilos, que sujetan con los labios y los dedos, y van eliminado los pelitos a toda velocidad. Duele menos que el método habitual, tardan sólo unos minutos en hacerlo, y tienen un precio fantástico ¡Vale la pena!
Me vuelven loca los perfumes, me apasiona el maquillaje y no puedo resistirme a probar todas las cremas que caen en mis manos. Además, tengo la buena suerte de trabajar como periodista de belleza. He creado este blog para comentarte mis descubrimientos, compartir contigo los trucos que conozco y, sobre todo, contarte cómo es el día a día en el universo "beauty".
martes, 20 de marzo de 2012
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Las cejas son una pesadilla y el mantenerlas es una pesadilla
ResponderEliminarhola Raquel, por fin hoy me decido a pasarme por Con Hilo Depilo, ya te contaré la experiencia... gracias por toda la información que nos das :)
ResponderEliminarHola!!!
ResponderEliminarEspero que te guste, me tienes que contar qué te ha parecido
besos
Raquel